Nostalgia encubierta
Pienso en sus palabras de pie frente al… Read more
Un breve documento sobre los días que pasan.
No sé nadar, pero el océano es una extensión del planeta a la cual no estoy dispuesta a renunciar. Hago uso de todo el equipo que esté a mi disposición: aletas, flotadores, chalecos, snorkels. Poco me importa parecer una niña de 5 años a punto de entrar a un chapoteadero. ¿Quién renunciaría a jugar sobre las olas, ver los arrecifes de coral en el caribe o presenciar la siesta de una familia de focas en el Golfo de California?…
Dar significado a una catástrofe que ha trastocado cada aspecto de la vida parece una tarea imposible. Hacer uso de los clásicos recursos optimistas se siente poco natural…
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